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Newsletter 104 –29.10.2020

La frutilla es una de las frutas más apreciadas por el consumidor argentino, sea por su dulzura, atractivo aspecto y amplios usos. En primavera, cuando las frutillas inundan al mercado y los minoristas ofrecen las montañas de frutillas; nadie puede resistirse a esta dulce fruta. Su consumo ronda el 1 kg/habitante/año.

Actualmente, las variedades comerciales más utilizadas son híbridos que provienen del cruzamiento de Fragaria x ananassa. Estos híbridos son recurrentemente utilizados por su mayor rendimiento, mejor tamaño de fruta, mayor sabor y aroma, y una mejor calidad y conservación post-cosecha.

La importancia de la frutilla reside en ser una fruta ampliamente consumida por todos los sectores de la población y su buen aporte de nutrientes, en especial vitaminas y minerales. Pero también significa un beneficio económico, tanto a través de sus exportaciones como por la cantidad de mano de obra directa que requiere para la realización de los trabajos culturales y la cosecha. Además, se la utiliza en distintos productos como mermeladas, yogur, helados y golosinas. El producto congelado se destina mayormente a la exportación, siendo una importante fuente de ingresos de divisas para las provincias de Tucumán y Santa Fe.

Producción Primaria

Se estima que el total de la superficie actualmente cultivada ronda las 1.500 hectáreas, con una producción total de 45.000 / 50.000 toneladas anuales, siendo las principales zonas:

Buenos Aires: cuenta con 550 has en producción, el 70% se encuentra en el área metropolitana, es decir Pilar, Exaltación de la Cruz, Zárate, La Plata, Florencio Varela y Berazategui, y el resto en la Costa Atlántica, especialmente en Mar del Plata.

La zona metropolitana cosecha durante la primavera y destina su producción a los mercados de la Capital Federal. Por otro lado, Mar del Plata posee una ventana de cosecha más extensa, desde la primavera hasta el otoño. Su producción se destina en parte al mercado nacional y otra parte a la exportación.

Santa Fe: dentro de las 345 has cultivadas en la provincia, se encuentra Coronda “Capital Argentina de la frutilla” abarcando el 85%. El 15% restante corresponde a la zona Costa. En esta zona la cosecha se realiza durante los meses de invierno y primavera, contando con un buen nivel tecnológico

Una de las estrategias tecnológicas que actualmente se está intentando incorporar, es la producción sin suelo. Los beneficios de esta práctica además de aumentar la producción por unidad de superficie, reducen el uso de agroquímicos y facilita la tarea de cosecha.

La producción tiene dos destinos: alrededor del 60% de la fruta fresca se destina a las ciudades de Rosario, Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires. El restante se procesa en la zona de la Costa, donde se localizan las agroindustrias dedicadas a su transformación.

Tucumán: 343 has en el Departamento de Lules, Alberdi, Monteros, Famaillá y Tafí del Valle. La producción invernal se vende en Buenos Aires, Mendoza y Córdoba; hacia fines del invierno se abastecen mercados regionales y locales, pero aproximadamente el 70% de la producción se destina a productos congelados.

Jujuy y Salta: en total son 90 has cultivadas. En Jujuy la producción se concentra en el Valle de los Pericos, Departamento El Carmen, mientras que en Salta en el Valle de Lerma. Una característica muy importante que diferencia a ambas zonas, es la ventana de producción y cosecha. Jujuy es inverno-primaveral y Salta en cambio primavero-estival. La fruta se comercializa 100% en fresco y sus destinos principales son: Salta (Capital, Orán y Tartagal), Mendoza y el mercado local.

Corrientes: con 72 has cultivadas es considerada “fruta primicia” en el mercado de Buenos Aires, por ser la primera en llegar al mismo durante el invierno, momento en el cual es cosechada. Además, posee otro momento de cosecha, durante la primavera, pero esta se destina al resto del país.

Neuquén: 59 has en producción en el departamento de Confluencia. Esta zona de producción además cuenta con capacidad de congelado y fábricas de dulces artesanales. La cosecha se realiza en primavera verano y se destina en su mayoría a abastecer al mercado local de Alto Valle de Río Negro y Neuquén.

Otras 25 has son cultivadas en la zona Sur (El Bolsón, El Manso, Mallín Ahogado, Lago Puelo y El Hoyo) donde el fuerte es la producción orgánica, pero también se pueden encontrar fábricas de dulces artesanales. También dentro de la provincia, en la localidad de Plottier existe capacidad de producción de plantines.

Mercado Central de Buenos Aires

En los últimos años se comercializaron alrededor de 5.000 tons a través del Mercado Central de Buenos Aires. La fruta proviene principalmente de Buenos Aires, Santa Fe, Corrientes y Tucumán. Las 3 primeras regiones destinan su producción principalmente al consumo en fresco y a abastecer los grandes centros urbanos. Tucumán destina el mayor porcentaje a la industrialización, elaborando congelados que se comercializan en el mercado interno, así como también se exportan.

En lo que se refiere a estacionalidad, se observa que la menor oferta se da en mayo-junio, siendo también el momento en el cual se registra los mayores precios. El volumen aumenta luego sucesivamente a medida que finaliza el invierno y se inicia la primavera. El pico de oferta se da en septiembre y se mantiene elevado entre octubre a diciembre. En ese período también registra los menores precios. Los valores de la primavera son la mitad de los que se dan en el otoño e invierno. A partir del nuevo año cae marcadamente y se mantiene en los bajos niveles hasta el fin del invierno.

Otras características del sector

Con relación a la mano de obra se destaca que el sector es un fuerte demandante, ya que los trabajos culturales se realizan en forma manual. A modo de ejemplo se menciona que por hectárea se requieren 340 jornales para realizar las tareas de plantación y cultivo, y otros 340 jornales para la cosecha.

Actividad industrial

La fruta producida en Argentina es particularmente apta para ser congelada por su alto valor de grados Brix y se presentan en las siguientes modalidades:

  • En bloques de frutillas sin palos y sin azúcar.
  • Fileteada (5 – 6 mm).
  • En cubos (6X6X6 mm)
  • Congelada sistema IQF.
  • Estos productos se destinan a la industria láctea, fabricantes de helados, panificación y productos vitivinícolas. Otros productos elaborados son jugos, mermeladas, jaleas, golosinas y cereales en barra.

    Caracterización de la industria

    La actividad industrial en la cadena de las frutillas se concentra en los productores que cuentan con las instalaciones (cadena de frío fundamentalmente) necesarias para cumplir con esta etapa de transformación industrial.

    Los grandes productores (aproximadamente 6 en la provincia de Tucumán) cuentan con viveros propios, estructura de frio y congelado y hasta la estructura para exportar las frutillas. Tucumán congela aproximadamente el 70% de su producción. La segunda provincia, en importancia de producción, Santa Fe, cuenta con aproximadamente 13 industrias que procesan alrededor del 50% de la producción local, mientras que el resto se deriva a mercados de Buenos Aires para su consumo fresco.

    Exportación

    Actualmente lo que se exporta es el congelado. En los últimos años no se han exportado frutillas frescas. Hace unos 10 años hubo algunas exportaciones de fresco hacia los países vecinos, pero siempre fueron volúmenes acotados y sin mayor incidencia sobre la industria.

    En contraposición con la mínima importancia de la exportación en fresco, la de congelado si tiene gran incidencia. Es fundamental para la provincia de Tucumán, donde es uno de los grandes rubros que se exportan y fuente de divisas.

    En el 2019 se exportaron 5.850 tons de frutillas congeladas, lo que significó un ingreso al país de 9,6 millones de USD. El precio promedio fue de 1.647 USD FOB/tonelada. Los principales países importadores en el 2019 fueron EE. UU. (52%), Brasil (9%), Canadá (6%) y confidencial (33%).

    En los últimos 5 años las exportaciones se ubicaron entre las 3.000 a 5.800 tons. Los ingresos valor FOB fluctuaron entre los 5,2 a 10,7 USD. Los EE. UU. y Brasil fueron los principales destinos, recibiendo en los últimos años el 50 y 36% del total exportado. Otros destinos fueron: Canadá, Japón, Uruguay y otros de menor incidencia.

    Importación

    Casi todos los años se importa un volumen acotado de frutilla congelada. El volumen se ubica por debajo de las 500 tons. Chile es el principal proveedor, seguido por Perú, China, Brasil, Egipto y Marruecos.

    En los últimos años prácticamente no se registraron importaciones de frutillas frescas.

    Autores: Virgina Forteaga – Ing.Agr.Betina Ernst